No sé si lo hemos contado alguna vez por aquí, pero somos más de campo que las amapolas. Hemos tenido la suerte de crecer rodeados de árboles y montañas.
Supongo que los madrileños conoceréis vuestra sierra, pero sí no es así, ya tenéis una visita obligada (y todos los que vengáis de visita a Madrid también).
Los colores son más bonitos que en cualquier otro lugar y, si vais por estas fechas, podréis comprobar el contraste de las flores primaverales con los restos de nieve en la montaña (todo un espectáculo para la vista).
Cuando llueve, el olor a hierba mojada es maravilloso y si eres de los que te vuelven loco los animales, como a nosotros, sólo tienes que mirar al cielo para ver todo tipo de aves rapaces. Lo de las estrellas, eso ya sí que sí, es de otro mundo, ¡¡en la ciudad no podemos ver ni la mitad!!
Hace ya algunos años que vivimos en la ciudad, pero se echa de menos la vida en la sierra, con sus olores, sus colores y su tranquilidad. Aún así, hacemos visitas todas las semanas.
Os preguntaréis por qué os contamos esto. Pues el motivo es que estamos muy contentos, porque en La Majada de la Pedriza han comenzado a vender nuestros productos. Es una tienda preciosa, llena de productos artesanos, y rodeados por el campo.
Que os decimos nosotros por experiencia que de vez en cuando hay que ir a la montaña, respirar hondo, abrazar árboles (yo esto aún no lo he probado, pero dicen que es una gran terapia... probaré) y apagar el móvil. Veréis que, después, la vida se ve de otra manera.
¿Os animáis y nos lo contáis?
Besos
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