¡¡Buenos días!!
Todos por aquí ya sabéis a estas alturas que somos unos
grandes amantes de los animales.
Hace pocos días tuvimos que despedirnos de nuestro
abuelete Yimo y por esta razón creo que es el mejor momento para hacer este
post.
Yimo no tuvo una vida fácil. Fue un precioso perro de
concurso que, cuando dejo de ganar premios, fue directo a una residencia en la
que estuvo siete años siendo uno más...
Cuando yo, Manuela, empece a trabajar
allí, él me enamoró y me robó el corazón desde el momento uno. No puedo
entender que un perro tan especial como él estuviera en el olvido.
Un tiempo
después conseguimos adoptarle; la idea, cambiarle la vida, y al final fue él
quién cambió la nuestra.
Es duro adoptar a un perro con 14 años pero, sin duda, merece la pena. Los abuelitos también se merecen una segunda oportunidad.
Yimo tuvo suerte, aunque fuera al final de su vida, pero
muchos perros y gatos en este país no tienen esa suerte: os abandonos, la finalización de temporada de caza, las
vacaciones... esto es insostenible.
Creo que todos conocéis las atrocidades que
todavía hoy se hacen en este país. Es por esta razón que siempre vamos a
insistir en que adoptéis y no compréis. Muchos Yimos están esperando su
oportunidad para cambiar vuestras vidas.
Si queréis ayudar a que otros perretes tengan otra oportunidad, también podéis colaborar comprando nuestro velón solidario en www.envelados.com. Los beneficios van
destinados a la recuperación de perros que han sido utilizados para peleas y
Ayucan hace un gran labor para recuperarles y darles una segunda
oportunidad para ser unos perros felices.
Muchas gracias, entre todos, podemos hacer un mundo más justo y mejor.